“Dejad que los niños vengan a Mí, y no se lo impidáis, porque de tales es el reino de los cielos” (Mt 19, 14)

Después de un largo invierno de unos treinta grados bajo cero, llega el esperado verano para los niños de nuestra parroquia en Jabárovsk. El verano es caluroso, entre veinticinco y treinta grados, y a veces más; lo niños por este periodo ya terminaron el ciclo escolar lo cual nos permite realizar numerosas actividades con ellos.

Este año hemos iniciado, a lo largo de un mes y 20 días (junio – Julio), el Oratorio de Verano, los patronos fueron los Santos Francisco y Jacinta Marto, con la participación de unos veintiún niños. Todas las actividades del oratorio estuvieron impregnadas por la vida de estos santos y, ciertamente, por la conmemoración de las apariciones de Nuestra Señora de Fátima patrona de nuestra provincia. El P. José, en las misas diarias en las cuales los niños participaban, predicó acerca de las más relevantes virtudes de los santos presentándolos como modelos a seguir. Por otra parte las hermanas prepararon con los niños del oratorio una conmovedora obra de teatro representando las principales escenas de la vida de los niños de Fátima.

El oratorio tenía su inicio a las nueve con el desayuno presidido por la bendición de los alimentos en forma de canto. Por la mañana las actividades eran más bien intelectuales y espirituales, se daba clases de inglés y español por grupos, de catequesis, y de canto. Durante las clases de catecismo un buen grupo de niños se prepararon para la primera confesión, la cual realizaron con mucho fruto al finalizar el oratorio. Al medio día, la Santa Misa, donde los niños participaban como monaguillos y un grupo de niñas embellecía la liturgia con los cantos. Por la tarde, luego de la Misa, iniciaban las actividades recreativas como ser futbol, básquet, vóley, competencias, juegos de mesa, manualidades, pileta, teatro, películas, entre otras actividades según sea el día y el clima. Hay que mencionar que de entre los eventos se encuentra el clásico divague de la viborita realizado por los chicos del oratorio y el concierto de cantos de los niños preparado por la hermana dominica Katerina, así como también el concierto de órgano protagonizado por la misma hermana. Como cierre de la jornada se rezaba el rosario en la capilla o un el patio, luego los jóvenes exponían de modo sintético alguno de los sueños de Don Bosco y, finalmente,  cada niño, con un tierno beso, saludaba a la Virgen María. Vale aclarar que el grupo de monaguillos y el coro de niñas son uno de los frutos visibles de este oratorio, son nueve monaguillos los que se reúnen de ahora en adelante cada domingo para servir a nuestro Señor en el altar. Además tanto los monaguillos como las niñas tendrán sus actividades propias a lo largo del año.

Jugaron un rol protagónico durante el oratorio las diferentes salidas que se realizaban los miércoles y viernes. Fuimos a lugares de entretenimiento donde ellos podían patinar, andar en bicicleta y monopatín, bañarse en el rio, y aprovechar las instalaciones del lugar llenas de juegos para chicos de la edad.  Se hicieron salidas a lagos, parques, paseo en catamarán, y al aquapark, así como también salidas un poco más culturales como ser los museos y el zoológico. Me parece importante destacar la colaboración para estas actividades, sea tanto de parte de los padres de los niños, como también de los encargados de los diferentes lugares que, en ocasiones, nos han ayudado con descuentos e incluso a veces ingresando sin costo alguno a los sitios de entretenimiento. Otra ayuda clave en el desarrollo del campamento fue la cocina, fueron dos abuelas que durante todo el campamento, voluntariamente y con mucho esfuerzo, han cocinado para ellos.

Durante el periodo del oratorio se les proporciono el bautismo a cinco niños, este fue quizás otro de los frutos visibles más destacables del oratorio; pudimos celebrar también la Solemnidad del Corpus Domini con una importante participación de fieles tanto en la procesión como en la Misa. Finalmente, como cierre del Oratorio, los niños se consagraron a la Virgen y se les impuso el escapulario de Nuestra Señora del Carmen.

Fueron muchos los frutos que la Virgen y los Santos Niños de Fátima nos han alcanzado de Dios y por los cuales debemos dar gracias. Encomendamos a sus oraciones los frutos de la labor apostólica que la Congregación realiza en Rusia.

Nuestra Señora de Fátima…